SANANDO EN GRUPO

Expresamos la rabia contenida

Los grupos son un soporte para nuestro crecimiento, puedes venir con tu pareja aunque es preferible que este espacio sea privado para ti, tu lugar seguro, precisamente para tener un espacio donde apoyarte y compartir. Es un espacio para sanar nuestras heridas, para aprender a escucharnos y escuchar al otro, para construir la intimidad y aceptación necesaria. La metodología que utilizo es La Diafreo, que es un trabajo corporal de integración: en este enfoque partimos del desbloqueo y armonización del cuerpo escuchando las percepciones y emociones que quedaron bloqueadas en él para protegernos y, en un entorno seguro, las aceptamos y a través de él conectamos con quien vamos siendo. Estos grupos son ideales para aquellas personas que no resuenan o no pueden hacer un proceso terapéutico, incluso también para los que al finalizar el proceso terapéutico desean seguir haciendo un mantenimiento corporal y emocional.

Estos grupos se hacen a partir de escuchar el cuerpo, estirar las cadenas musculares observando las distintas compensaciones que hace nuestro cuerpo, aprender a estar presentes en nuestras emociones y dejar que estas circulen a través de la respiración consciente.

Iniciamos el encuentro con un breve compartir en círculo dónde estamos internamente, cómo nos sentimos, es totalmente libre y puedes elegir compartir lo que deseas y también puedes no compartir. Nadie del grupo opina, solo escuchamos, luego vamos al cuerpo para estar presentes en las emociones que se puedan activar, conectar con nuestra guía interior que nos dice cómo nos sentimos y si hay alguna decisión a tomar ella lo sabe. Usamos la voz, la respiración consciente y técnicas para liberar el stress, así como prácticas en grupo o parejas y al finalizar el trabajo corporal volvemos a compartir nuestras sensaciones físicas y emocionales, siempre es libre, cada persona comparte lo que desea y hasta donde desea.

Nuestra mente es un órgano maravilloso que sirve para muchas cosas pero cuando tratamos de usar nuestra mente para racionalizar nuestras emociones lo que hacemos es reprimirlas, saltar por encima y toda emoción reprimida sale más tarde o temprano en forma de enfermedad, depresión, adicción, crisis económica, molestar en el cuerpo, por eso liberar el cuerpo es liberar nuestras emociones, pues solo podemos sanar desde el cuerpo.

Tendrás el acompañamiento y complicidad de otras personas que como tú desean vivir una vida más conectada, íntima y plena, personas empáticas y sensibles al dolor propio y ajeno (o con deseo de serlo).

Trae ropa cómoda. Puedes cambiarte aquí.